Contenido
Introducción
Comienzo una serie donde describiré los principales desperdicios que hay en los departamentos técnicos de las empresas y que, hasta la fecha, han sido considerados como fuentes de valor al producto. ¡Nada más lejos de la realidad!
En anteriores artículos, expliqué que era Lean Engineering o, al menos, lo que entiendo yo por esta filosofía de trabajo que guarda enormes similitudes con el Lean Manufactruing, Lean Service, Lean Selling, Lean Thinking,… Pero me centraré en la Ingeniería y en sus principales focos de desperdicios.
En esta primera entrada hablaré sobres los planos técnicos. Los planos de fabricación, los planos de ensamblajes, planos de montaje, planos de instalación,… Trataré de demostrar que casi todos ellos son un desperdicio completo: consumen recursos, en ocasiones de alto valor, dilatan los proyectos, y los errores que ellos acarrean suelen ser muy costosos para la empresa.
¿Cómo, entonces, no considerar un desperdicio la realización de planos técnicos?
Otras entradas en esta serie:
- Lean Engineering. Desperdicio #2: El conocimiento tácito. El conocimiento tácito, vital para una empresa, es un agente doble porque es fuente inagotable de ineficiencias y desperdicios. Abordamos en este artículo como solucionarlo.
- Lean Engineering. Desperdicio #3: el «Artista». El ingeniero «artista» es un desperdicio que no se puede permitir ningún departamento técnico: conlleva exceso de celo, exceso de tiempo y exceso de desperdicio.
- Lean Engineering. Desperdicio #4: La codificación. Codificar se convierte en un desperdicio cuando no nos permite ser ágiles con la gestión documental. ¡Evítalo!
Los planos técnicos
¡Qué nadie se equivoque! A mi me encantan los planos. De siempre. Además, se me daban muy bien: en el bachillerato nunca me tuve que llevar nada a casa para terminar y sacaba unas notas de órdago, excepto en C.O.U. que la profesora me cogió manía, ¡en serio! Nunca he sabido porqué pero no me podía ver, ella sabía que mis planos rallaban la perfección pero no pasé del Notable.
Y si escogí Ingeniería Industrial y no Matemáticas, fue, en gran parte, porque el Dibujo Técnico tenía una gran importancia en la carrera. Mira, mira, que arte tenía yo 😉
Bueno, quería dejar constancia de ello para que nadie piense que no me gustan los planos y por ello los considero un desperdicio.
Pero no, no los considero un desperdicio. Considero que tener decenas de personas en departamentos u oficinas técnicas haciendo planos una y otra vez, eso sí que es un desperdicio. El plano sigue teniendo su valor para una perfecta fabricación, una perfecta instalación o un perfecto montaje.
Pero no nos engañemos, el cliente final no va a pagar más por tu producto porque tu departamento de oficina técnica baje a fábrica unos planos perfectos que les ha llevado horas finalizar, ¡al revés! Seguro que te dice que si lo hicieran en menos tiempo, ¡le cobrarías menos por las bancadas de los motores (o cualquier otro producto) que le vendes!
Para un cliente que hagas buenos planos lo considera, seguramente, como el valor al soldado, ¡que se le presupone!
Principales desperdicios de un plano técnico
Ciclo de vida de un plano
Un plano técnico recoge la información para ciertos menesteres. Perfecto. Eso es el valor del plano, pero ya no tiene más valor: no es poco, lo sé, pero no lo sobreestimemos.
Vamos a hacer un ejercicio de imaginación y pensar que el plano es el producto en sí. Ok. Tendríamos las fases comunes para la gestación de un producto (o un pedido, como mejor veas):
- Datos de entrada que definen el plano. Serían la pieza que debe ser representada, las vistas, la forma de acotación, un cajetín con información y quizás un listado de materiales si en lugar de una pieza es un conjunto. Como ves, doy por hecho que la pieza o ensamblaje está definida completamente, ¡solo hay que hacer un plano!
- Desarrollo de producto. Necesitamos un proyectistas o un ingeniero para desarrollarlo. Obviamente, que sepa de que va el producto, la pieza, y que conozca a donde se destina el producto (plano): a Fábrica para ser interpretado por operarios y poder ser fabricada.
- Medios productivos. Obviamente, un puesto de trabajo de oficina con su PC y un software de diseño CAD 3D. El mío favorito, ya sabes, SolidWorks (luego, más adelante verás una de las razones del porqué lo es, ya que dibujar, dibujan… todos los CAD lo hacen muy bien, la verdad).
- Un planning: tiempo, tareas, fecha de entrega, etc. Imagino que estarás de acuerdo, que tendrá que estar en la agenda del trabajador.
- Verificación y revisión. Cuando se termine debe ser revisado por un responsable y dado el visto bueno. Y, en fin, ya sabemos que estamos todos muy ocupados y que hay que priorizar tareas, así que muchas veces esto le cuesta un poquito.
- Documentación y comunicación. Una vez dado el OK al plano, se registra, se guarda, se envía a terceros, se almacena, se le da código, se apunta la revisión. ¡Vaya con el plano! ¡Si solo era un plano! Como diría Ortega y Gasset, un plano es un plano y sus circunstancias. (Me encanta esta frase).
- Posventa. Modificaciones. Ahhhhh,… pensábamos que habíamos terminado pero no. En algunas ocasiones, el cliente no está satisfecho con el resultado y quiere hacer modificaciones, o exigir un reembolso o directamente, denunciarnos. ¡Joer, con el planito! Piensa que si es una plano de instalación o montaje, como no esté claro o bien definido, el destrozo puede ser importante.
Bien, amigos. El ciclo de vida de un plano se las trae. ¿Ves? Es como el ciclo de vida de un producto o de un pedido. Con sus fases, sus tiempos de espera, sus modificaciones, sus ¡todo! Pues analicemos.
Desperdicios
La verdad que lo tengo fácil y espero, querido lector que ya me veas venir. Tengo todas las fases del producto-plano, desmenucemos los desperdicios que hay por doquier. Y luego, no te preocupes, que te diré como eliminarlos 😉
Datos de entrada
Aquí, he comentado que partimos de una pieza o ensamblaje finalizado, así que por este lado, nada que objetar. Primeros desperdicios, bien escierot que algunos condicionados, pero, ¡podrían darse!:
Desperdicios nº1 – Búsqueda y selección de plano-plantilla. O bien, el proyectista parte de cero para hacer el plano (esto significa desperdicio de tiempo) o bien, busca en el histórico, realizar un Pack & Go y comienza desde allí; que , igualmente, invertirá algo de tiempo, aunque sea menos que partiendo de cero.
Desperdicios nº2 – Mala elección de cajetines, formatos, plantillas. El proyectista está muy saturado de trabajo y ha cogido una plantilla de pieza de chapa plegada en lugar de una plantilla para pieza soldada, que es lo que realmente debe tratar. Desperdicio de tiempo y de calidad.
Desarrollo del producto y medios productivos. Planificación.
Como he comentado, sería la realización del plano en sí con los medios productivos que la empresa le ponga a su alcance
Desperdicio nº3 – Delineación manual. Aunque SolidWorks (u otros CAD que uses) tienen asistentes para vistas, perfiles, corte, formas de acotación, colocación de balones, notas, etc. ¡Hay que hacer a mano gran parte del trabajo! Desperdicio de tiempo
Desperdicio nº4 – El equipamiento en sí. Pues sí, necesita un PC y una licencia de SolidWorks durante un tiempo, si no tuviera que hacer el plano a mano no requeriría de la licencia durante X minutos, horas o días (depende de la complejidad del plano). Así que, desperdicio de material durante un tiempo N.
Desperdicio nº5 – Errores, así en general, por no tener tiempo, por tenerlo todo en la cabeza, por hacerlo todo a mano,… ¡desperdicio!
Verificación y revisión
Desperdicio nº6 – Una vez concluido el plano, debe ser validado por un responsable superior que atestígüeme que todo está correcto. Generalmente, ya existe cierta automatización en esta fase donde el proyectista avisa a la persona indicada y ésta, tras su visto bueno, procede a la firma del plano. No obstante, compruebo con demasiada frecuencia que el desperdicio de tiempo para esta tarea es, a veces, abrumadora y exasperantemente largo.
Si hay un tercero, ya la cuestión comienza a tener tintes dramáticos y si el sistema de gestión de calidad es muy estricto, resulta que poner un plano en marcha dentro de la empresa es una epopeya griega digna de tal nombre.
Documentación y comunicación
El desperdicio de esta parte de la vida del ciclo de vida de un plano entronca directamente con la anterior que hemos comentado. El plano ya está aprobado, ahora hay que ponerlo en circulación para ello, se comenten varios desperdicios clamorosos:
Desperdicio nº7 – Codificación y almacenamiento. Directamente, desperdicio del tipo tiempo y tipo error humano ya que hay bastantes tareas que hacer. Por norma general, codificación manual (puede que no se pierda mucho tiempo pero podrían darse el caso del error humano), después se suele guardar el plano en diferentes formatos para diferentes usos: formato SolidWorks (u otro CAD) para enlazarlo al diseño original, formato PDF para distribuir entre varios departamentos, formato DXF si tiene una vista de chapa desplegada que deba ser usada en máquinas-herramientas, formato CSV o XLXS de listado de materiales asociados, así como otras variables de propiedades del plano y de lo que contiene en sí. En fin, un rato largo y no te equivoques.
Se debe guardar o en servidores (sistema de carpetas, ya obsoleto pero todavía muy en boga en pequeñas oficinas técnicas) o registrarlo en almacenes para CAD como PDM (Product Data Management) y similares. Y lo mismo, lleva su tiempo.
Postventa
Seguimos con la idea y llegamos a la posventa. Estupendo. Empiezan las modificaciones del plano, las revisiones, la ediciones, cambios,… El producto está vivo así que el plano que da soporte, también.
Desperdicio nº8, 9,… – Esto suele ser un dolor de cabeza para muchas empresas porque, prácticamente, deben repetir todos los pasos anteriores: modificación, actualización, revisión, verificación, visto bueno, registro y comunicación. ¿Qué voy a decir? Enésimo desperdicio, ya he perdido la cuenta.
¿Me puedes decir qué valor hemos aportado al producto final que el cliente pueda valorar?
Yo creo que CERO PATATERO.
Entonces, ¿qué hacer? Porque el sistema de calidad y gestión nos obliga a realizar todos estos pasos, no saltarnos los permisos ni lanzar nada a fabricación sin todos los parabienes de los distintos responsables.
Ya. Bueno, lee mi propuesta.
Solución al desperdicio Plano
Te voy a sorprender. ¡Automatiza!
Lo viste venir, pero así, de pronto, ¿cómo? ¿el qué?
Yo veo varias modalidades de automatización y por la experiencia con clientes, todas sirven para eliminar desperdicios, quizás no en el 100% pero eliminar desperdicios es mejor que tener desperdicios, ¿no?
Veamos los diferentes niveles de automatización que te propongo. Tú verás cómo es tu empresa o tu departamento técnico y puedes ver lo que te conviene, y sino lo ves, ¡me preguntas directamente!
Nivel TOP: Configurador Técnico completo para tu Producto
En fin, aquí no me voy a explayar, en esta web tienes cientos de entradas, artículos y videos (bueno en nuestro canal de Youtube). Un configurador técnico de tu producto ya incluye la obtención automática de planos, su registro en tu sistema y la comunicación a terceros.
Como está dentro del configurador NO NECESITA la validación de terceras personas y el tiempo que se ahorra es mayor del 90%. En ocasiones hemos reducido de 40 horas semanales a 1 sola.
Nivel PRO: Desarrollo a medida
O bien ya tienes un configurador o bien quieres una Suite de aplicaciones a medida para automatizar los planos o alguno de los procesos que he descrito aquí. Pues perfecto, busca un experto en programación de este tipo de soluciones, para que te haga unas macros o desarrollos a medida, de modo que logres:
- Crear planos desde cero
- Codificar automaticamente
- Registrar planos en N ubicaciones
- Crear entregables asociados: DXF, PDF, XLSX, SV, TXT, DWG,…
- Mil cosas más
Nivel PREMIUM: usa las macros SAMAT de www.solidworksmacros.com
Tampoco hay mucho que decir aquí. entra en nuestra web y elige la macro que mas se adapte a tus necesidades. No lograrás una automatización brutal pero quizás sí que elimines ese cuello de botella que tanto atora tu proceso productivo.
Ejemplos de planos-desperdicio
Planos de instalación
Un ejemplo palmario de lo que digo son los planos de instalación de ascensores. Vemos dos ejemplos: uno desarrollado con el método tradicional, a mano, tirando de histórico y otro, desarrollado mediante programación de la ingeniería del ascensor y con software adecuado.
¿De verdad puedes creer que el cliente final le interesa que el plano A se haya desarrollado en 4, 5 ó 12 horas y que eso le añade valor al ascensor y que estará dispuesto a pagar más?
¿O crees que preferirá el plano B, automático, en segundos y con el nivel de detalle adecuado para sus necesidades?
Planos de piezas de chapa
Cada pieza de chapa precisa de un plano de fabricación que indique:
- Dimensiones de la pieza y vistas de perfil, planta y alzado, para poder plegar la chapa
- Dimensiones de la chapa desplegada para realizar el corte de la chapa de forma adecuada. En ocasiones, este es otro plano en formato DXF.
¿Qué valor le aportamos al cliente por invertir N minutos u horas en crear ese plano o planos? Ya te lo digo yo, ninguna. Es una tarea que debe automatizarse para eliminar este desperdicio.
Bueno, bueno, y si encima es un plano paramétrico, como el que se ve a continuación, muy bonito él, la verdad, pues el desperdicio se dispara de una manera alarmante… pero lo alarmante de verdad es que no veas que esto es un desperdicio.
Plano de montaje
Idem de ídem. ¿Qué pagará tu cliente de más por hacerle este plano a mano? ¿Y si se lo haces con plumillas en papel vegetal?
Ya respondo yo: CERO EUROS. Pues por eso mismo, este tipo de planos también son desperdicio en oficina técnica. ¡Cuidado! En ningún momento, y recordad el inicio del artículo, que los planos no aporten valor en algún momento del ciclo de vida del producto: lo que no aporta valor es las horas que metemos en ellos para obtenerlos.
Conclusión
Si te he convencido de que hacer planos, en general, es una pérdida de tiempo, recursos y dinero; un desperdicio que hay que eliminar lo máximo posible, me doy por satisfecho y te animo que me lo hagas saber (correo, teléfono, comentario aquí abajo, linkeidn, paloma mensajera,…).
Y si te he mostrado las vías para solucionarlo y quieres que te eche una mano, ¡genial! Ya saber donde encontrarme.
Un plano que no hagas, un error que no cometes y un tiempo precioso que gaanas. ¡Automatiza!
Súbete al Lean Engineering.
Este artículo ha sido escrito por David Sánchez Mateo, experto en Ascensores y Configuradores, propietario y fundador de Ingeniería SAMAT. Ingeniero Industrial Mecánico por la Universidad de Zaragoza (Centro Politécnico Superior, actual EINA), Máster en Gestión de la Innovación y Prevención de Riesgos Laborales.