No creas que parece una pregunta tonta, desde hace unos días estamos leyendo titulares en las prensa indicando que se necesitan unos 200.000 ingenieros en 10 años en este país, pero en realidad, ¿para qué quieren las empresas a estos ingenieros?
La capacidad de un ingeniero ya la describí en algún artículo anterior que puedes consultar aquí y para qué sirve la ingeniería mecánica también escribí este artículo, incluso te dije cuando necesitarías contratar un ingeniero o cuándo subcontratar servicios de ingeniería (puedes consultarlo aquí).
Pero vayamos al grano y veamos para qué necesitas un ingeniero porque en este aspecto veo con mucha frecuencia solicitudes de puesto de trabajo con ciertas contradicciones, en los cuales se precisa un ingeniero industrial o un ingeniero técnico, un ingeniero de grado o incluso un proyectista; está claro que no se sabe o no se tiene claro qué es lo que se necesita para ese puesto de trabajo.
Un ingeniero industrial te será útil si…
Desde mi punto de vista vas a necesitar a un ingeniero industrial cuando tengas que crear, controlar o dirigir proyectos clave de tu empresa; proyectos de ingeniería orientados a producto o procesos productivos. Para este tipo de trabajos vas a necesitar un ingeniero industrial mecánico, eléctrico, el que necesites en función de la naturaleza del proyecto.
Un ingeniero industrial no te será útil si…
Pero voy a hacer hincapié en aquellos aspectos o aquellos trabajos para los que crees que necesitas un ingeniero o has estado utilizando un ingeniero hasta la fecha, pero que en realidad no lo necesitabas para ello. Otro perfil técnico hubiera sido acorde con dichas responsabilidades.
Te darás cuenta porque probablemente algunos de ellos se hayan ido de la empresa quizás cansados con su trabajo, o en busca de nuevos retos. Pero, ¿por qué? Pues quizás porque ese puesto de trabajo no era para un ingeniero industrial.
Entonces mira, te resumo: no necesitas un ingeniero industrial si su cometido va a ser una labor rutinaria, la que sea, no importa, siempre que utilices a un ingeniero industrial para una labor repetitiva es que no es una posición para él y acabará cansándose y se marchará tarde o temprano.
No necesitas a un ingeniero para sacar listas de materiales o para definir códigos o para organizar los planos de un pedido ni siquiera para actualizar un diseño CAD basado en conocimientos ya establecidos y previos. Si ya está establecido desarrolla un sistema para que esa labor se automatice pero no emplees a un ingeniero industrial. Se irá.
No necesitas a un ingeniero industrial para hacer “lo que se ha hecho siempre en esta empresa”, quizás para ello necesites otro tipo de técnico pero no un ingeniero industrial. Probablemente, no obtenga un reconocimiento y se vaya también. Recuerda, que la mayoría de las personas abandonan su trabajo por falta de reconocimiento y si no tienen un reto, no lograrán dicho reconocimiento.
Como norma general, no utilices a un ingeniero industrial en ninguna actividad que otro técnico bien preparado y entrenado podría llevar a cabo por si mismo.
En definitiva, necesitas un ingeniero industrial para todo lo que tenga que ver con la creación de nuevos productos, la gestión de líneas de fabricación y la resolución de problemas complejos dentro de tu empresa, generalmente, orientado a eso, al producto industrial. En estos puestos es rentable un ingeniero industrial.
¿Cuánto vale un ingeniero industrial?
En los supuestos primeros que te he nombrado anteriormente: mucho, es un despilfarro tener a un ingeniero hacer tareas para que las que está sobre preparado. De hecho, seguramente, le estuvieras pagando en función de la labor y no de su capacidad.
Pero siempre he sostenido que un ingeniero motivado, experto, comprometido con la empresa cuesta muy poco. O mejor dicho, devuelve a la empresa diez veces lo que cuesta; así que su rentabilidad es enorme. Todo lo que aporta un ingeniero a una empresa y todo lo que ahorra se propaga a lo largo de todos los departamentos.
No te preguntes cuanto cuesta sino cuanto vas a ganar con él.
¿Qué tipo de ingeniero necesitas?
Porque no es lo mismo un ingeniero recién egresado que un ingeniero sénior con 15 años de experiencia. Sus atribuciones serán las mismas, incluso sus capacidades, pero su conocimiento y su experiencia no tienen nada que ver. Entonces esta es la primera pregunta que deberías hacerte, ¿necesito un ingeniero sénior o un ingeniero junior?
Esto es capital porque la inversión que vas a tener que hacer en uno o en otro no es la misma. Desde luego el salario varía enormemente. Yo considero que se necesita un ingeniero junior cuando tienes la necesidad de formarle en tu producto y en tus procedimientos de trabajo. Obviamente él traerá savia fresca, pero tendrás que aprender cómo trabajar con tus medios con tus mecanismos y con tu gente.
Por el contrario, es muy buena idea contratar a un ingeniero sénior cuando tienes un proyecto maduro y lo que necesitas es una rentabilidad inmediata a dicha inversión. Un ingeniero experimentado se aclimata a un nuevo puesto de trabajo en muy poco tiempo y será capaz de realizar su trabajo nada más aterrizar.
Por si te sirve de ejemplo, en Ingeniería SAMAT tenemos una mezcla de talento, juventud, experiencia y por qué no decirlo, de todos estos ingredientes a la vez. En SAMAT tenemos dos personas que las hemos formado internamente, incluso han desarrollado el proyecto de fin de carrera con nosotros; y también tenemos ingenieros experimentados que hemos contratado con muchos años ya de experiencia a sus espaldas y con unas carreras profesionales de largo recorrido, e incluso, reconocidos en su sector.
La mezcla de ambos de ambas tipologías de ingenieros, júnior y senior, te asegura el éxito y ofreces una confianza a tus clientes fuera de duda.
La organización interna es clave y determinante
Otro aspecto clave que te indicará la eficiencia de esta nueva contratación o incorporación, la de un ingeniero industrial, vendrá dada por la propia organización interna del departamento y sus procedimientos. De nada servirá contratar a un veterano ingeniero si su principal labor en tu empresa es batallar contra las ineficiencias del departamento o los desperdicios de los procesos de trabajo. Obviamente, puede que lo hayas contratado precisamente para solucionar este problema, pero si no es el caso y se une al resto de compañeros en esta lucha tan desigual, la eficacia de su incorporación no será la misma, obviamente, que si se incorporará a un departamento de ingeniería optimizado.
En otros artículos de nuestro blog hacemos referencia a cómo entendemos que debería ser un departamento de ingeniería, basado en la cultura Lean Engineering. Te dejo el enlace para que te familiarices con estos conceptos si no lo estás ya, aquí.
He querido resaltar este hecho porque por muy buen motor que compres si el resto del vehículo, chasis, amortiguaciones no están en perfectas condiciones, el motor no rendirá según tus expectativas. Y eso frustra. Mucho.
Entonces, ¿para qué quieres un ingeniero en tu empresa?
¿Ya lo sabes?
Y sino, te ayudo.
Este artículo ha sido escrito por David Sánchez Mateo, experto en Ascensores y Configuradores, propietario y fundador de Ingeniería SAMAT. Ingeniero Industrial Mecánico por la Universidad de Zaragoza (Centro Politécnico Superior, actual EINA), Máster en Gestión de la Innovación y Prevención de Riesgos Laborales.
