Hay muchos artículos, blogs, noticias sobre las ventajas de invertir en I+D (en Investigación y Desarrollo) y nuestra intención no es repetir los mantras tradicionales. Queremos dar nuestra visión y, sobre todo, nuestra experiencia con clientes y proveedores durante estos años de singladura de SAMAT. Veamos a qué nos estamos refiriendo.
Decálogo de beneficios al invertir en I+D
Enumeramos los principales beneficios de la inversión en I+D, para ello, aprovechamos que las últimas cifras en España indican que se ha aumentado la partida presupuestaria de las empresas privadas en este ámbito. Todavía nos encontramos muy lejos de lo que invierten las empresas europeas de media, y lamentablemente, la brecha no para de abrirse.
Evolución de la inversión en I+D respecto al PIB en España y UE28, 2009-2017. Fuente: “Statistics on research and development”. Eurostat ( 2019) y elaboración COTEC. Fuente: Informe COTEC 2019.
1º Es (muy) rentable
¡Empezamos fuerte! Pues sí, en efecto, es la forma más directa de ganar dinero mejorando su producto. Decenas de estudios lo demuestran, véase los informes COTEC, así como la propia historia de cada empresa… Debemos cambiar la mentalidad cuando se nos presente un proyecto innovador, en lugar de preguntarse usted cuánto cuesta el proyecto debe contemplar cuánto va a ganar con él.
2º Su competencia lo hace
¡Y creo que está de acuerdo conmigo en esto!
En segundo curso de carrera Juan Lladó, mi professor de Mecánica, nos pregunto que si tuviéramos que diseñar un coche de fórmula 1, dónde pondríamos el motor, si delante, atrás, 4×4,… Y tras escuchar nuestros comentarios nos respondió que él lo pondría detrás por la sencilla razón de que ¡los que saben de Fórmula 1, lo ponen detrás!
En efecto, es un razonamiento muy poco innovador, pero lo que quiero comunicar con esta anécdota es que si su competencia, si las grandes empresas, si las compañías a las que queremos batir, invierten en I+D, ¿cómo no lo vamos a hacer nosotros?
3º Es su futuro
En lo que invierta hoy, será en lo que se convierta mañana. No hay atajos, bueno sí: comprar la innovación, que se puede, pero suele ser mucho más cara que crearla y gestionarla internamente. Siempre es positivo un impulso desde fuera, pero que ese impulso sea táctico, no estratégico es nuestro parecer.
4º Retendrá el talento en casa
¡Casi nada! La gente innovadora, tractora, con ideas, no se queda en las empresas donde no se les permite fluir y desarrollar su potencial. Un proyecto retador es lo que necesitan la mayoría de los trabajadores mejor preparados, experimentados e inquietos de su organización.
5º Representa una parte importante de su imagen exterior
Hay marcas de coches que su leit motiv es la innovación y es lo que quieren notar en sus anuncios, como hace Audi. ¿Es el mejor coche del mundo? No importa, ¡es el que más innova! (o es lo que nos transmite). Y eso, engancha al usuario.
6º Desgrava, ¡y mucho!
Las administraciones públicas le premiarán si invierte en innovación, tenga éxito o no. Y podrá desgravarse de la base imponible, un porcentaje de su inversión. Es decir, que parte de lo que usted dedique a I+D, se la pagamos entre todos.
7º Aumenta probabilidades en concursos públicos
Una empresa innovadora mejora sus puntos a la hora de contratar proyectos con la Administración y con multinacionales. Ahora es una ventaja competitiva, en el futuro será una obligación.
8º Involucra a la organización internamente
Los proyectos de innovación trascienden dentro de la empresa y hace protagonistas a sus integrantes, los aglutina ante retos ilusionantes que hacen que se forme una cultura innovadora dentro de la empresa.
9º Sus proveedores le cuidarán mejor
Probablemente, su innovación sea apreciada por todos sus colaboradores y una parte importante son sus propios proveedores, que verán con buenos ojos todos sus esfuerzos; eso, necesariamente, lo llevará a mejorar su relación y a crear lazos de interés más estrechos
10º Accederá a subvenciones y ayudas
Aunque no es el principal objetivo de innovar, no cabe duda que a nadie le amarga un dulce, así que si organiza adecuadamente sus proyectos de innovación, podrá acceder a las subvenciones locales, estatales e incluso europeas. No desaproveche esta gran oportunidad.
La alternativa no es muy halagüeña
Parece obvio. Si no innova o sino mejora su proceso de innovación, perderá competitividad frente a sus rivales y frente al mundo. Su imagen corporativa se resentirá y se le cerrarán puertas que antes tenía abiertas de par en par. Si lo piensa, por un esfuerzo que la organización puede asumir internamente, tendrá asegurada la continuidad de su empresa. Y por supuesto, desde SAMAT, para valorizar su I+D, podemos echarle una mano en la Gestión de la Innovación de su empresa.
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